¿Cómo te explicas tú
que nuestro pueblo, un pueblo de un pasado tremendamente viril, soporte lo que
no soportaría un rebaño? Dime ¿Cómo te lo explicas?
Vidal Rojas, Fiebre
Imagen en http://www.priceminister.es |
Miguel Otero Silva tipifica con Vidal Rojas, al estudiantado
que insurge en el año 1928 contra la dictadura gomecista. Carente de formación
doctrinaria, pero con un fervoroso sentimiento antigomecista, cree que a
través de la acción directa (protestas, complots, asaltos, invasiones,
alzamientos) pueden derrocar al general Juan Vicente Gómez. A la acción
estudiantil se opone una eficaz y disciplinada política represiva del régimen
que termina con la insurgencia directa de estos jóvenes. El movimiento que
había nacido con la Semana del Estudiante se desintegró en 1929, desmoralizado
luego de las duras represiones y de las infructuosas tentativas. A través de
diferentes caminos enrumban en el futuro sus destinos.
Con una descripción ambiental que refleja el modo de vida
del estudiante típico de la época, ese a quien Jacinto Fombona exalta en los
poemas leídos en Teatro Municipal durante la Semana del Estudiante, y que le
trae la represión del régimen; ese estudiante que vive en pensiones lleno de
romanticismo, de ideales y de estudio, con sus inquietudes sin respuestas, las
fiestas del club Venezuela y los compañeros de grado hasta el día de los
acontecimientos de la Semana del Estudiante, que cambian el rumbo de su
existencia.
Esa falta de formación doctrinaria es la que explica que
Armando Pereda, compañero de aula de Vidal Rojas, no encuentre respuestas para
explicarse la sociedad venezolana. Y esa
falta de conocimiento de la sociedad lo encierra en grandes silencios. Vidal,
tampoco tiene respuestas cuándo Armando le pregunta: ¿ ¿Cómo te explicas tu que
nuestro pueblo, un pueblo de un pasado tremendamente viril, soporte lo que no
soportaría un rebaño? Dime ¿Cómo te lo explicas?.
Dentro de los muros universitarios, testigos mudos de las
discusiones estudiantiles sobre política, aunque como dice Vidal “No de teorías
políticas que para nosotros, son arcanos brumosos. Nuestra política es más
simple y elemental cuestión de dignidad personal. Nuestra ideología política –ser
enemigos de la tiranía- no es propiamente ideología política sino respiradero
de la condición humana.
http://www.tiempo.uc.edu.ve/tu458/paginas/14.htm |
Lo que Miguel Otero Silva señala en Fiebre es el despunte de la necesidad del
bagaje doctrinario para comprender la realidad social, económica y política del
país. Es el despunte de la ideología como elemento político en la lucha contra
el gomecismo. Entendámoslo así el germen, algo incipiente, pero que hace acto
de presencia. Es el nacimiento de la conciencia política en un grupo de jóvenes
universitarios.
Hace 29 años realice mi tesis de grado para obtener la
licenciatura en Historia, analizando la novela Fiebre, testimonio de las luchas
de los estudiantes ucevistas contra la dictadura gomecista. El interés en este
tema nació en los seminarios sobre literatura e historia dictados por el Dr.Pedro Beroes, en la Escuela de Historia de la Universidad Central, tuve el
honor que aceptara ser mi tutor.
La novela testimonio reconstruye artísticamente un hecho
individual o colectivo basado en la realidad. Este género novelístico desempeña
una relevante función social porque es uno de los vehículos o medios que
permite difundir masivamente determinados momentos históricos que es necesario
denunciar, divulgar, para que la población se eduque, se concientice sobre su
pasado histórico.
En Venezuela la producción de novelas testimonio fue
aceptada ampliamente por escritores deseosos de hacer la denuncia y el público
de conocerla. Sobre la época gomecista se han producido entre otras las
siguientes: “Memorias de un venezolano de
la Decadencia” de José Rafael Pocaterra, la cual influyó en los jóvenes de
la generación del 28, especialmente el capítulo “La Vergüenza de América” donde
se testimonia sobre torturas, muertes y prisiones en las cárceles
gomecistas. “La carretera” de Nelson
Himiob, “Fiebre” de Miguel Otero
Silva. En ambas novelas el carácter ficcional es secundario y la acción se
subordina a los sucesos acaecidos
durante los años 1928 y1929, de los cuales fueron protagonistas los estudiantes
de la Universidad Central.
No hay comentarios:
Publicar un comentario